El arándano es una baya globosa, de pulpa aromática, jugosa y de un agradable sabor. Desde hace algo más de 10 años, Perú comenzó a incursionar en la producción de este fruto y lo ha hecho con tanto éxito que hoy en día es el primer exportador del mundo. Y, según los expertos, va encaminado a convertirse en el primer productor a escala mundial.
El buen clima de Perú permite que la producción de esta baya se realice durante todo el año, lo que le otorga una gran ventaja sobre los otros países productores. En la campaña 2022-2023 el país incaico ha exportado 286.240 toneladas de arándanos a 35 países. El principal país receptor es Estados Unidos, seguido de naciones de Europa y Asia.
Según Proarándanos, una asociación gremial de exportación y comercialización de arándanos del Perú, la mayor parte de las plantaciones se encuentran en la región de La Libertad, seguida por Lambayeque, Ica y Lima.
El origen de la producción
En el año 2002 el ingeniero peruano Carlos Gereda tuvo la idea de potenciar la producción de arándanos en Perú. El obstáculo a superar era encontrar una variante de la planta que se pudiera cosechar con las condiciones climáticas del país. Después de varios intentos de ensayo y error, que incluyeron trabajo agrícola y científico, finalmente determinaron que las variedades Biloxi, Duke, Sharpblue y Legacy funcionaban bien.
En el 2009, Gereda fundó Inka’s Berries, la empresa que sentó las bases del crecimiento y desarrollo de los arándanos en el territorio peruano.
Beneficios y propiedades
Es importante resaltar que los arándanos ofrecen gran cantidad de antioxidantes, y son beneficiosos para reducir o regular la presión arterial. Son ricos en vitaminas A, B y C, que contribuyen a fortalecer el sistema inmunológico. También favorecen la salud ocular, ayudan a mejorar el tránsito intestinal, tienen acción antibacteriana y son buenos aliados a la hora de prevenir la diabetes.