La producción ovina y caprina latinoamericana está siendo “esquilada” por los eventos meteorológicos y los sobresaltos coyunturales de las economías regional y mundial.
Tras la pandemia, aunque sin perder su resiliencia, el productor de estos rodeos, propios generalmente de tierras y climas hostiles, ve con preocupación este panorama.
Como referencia, ya en 2021, la de ovejas y cabras en pie fue la exportación con la posición 763 (0,0094%) del total del comercio exterior internacional. Con un volumen de $ 1,98 mil millones (o millardos) de dólares estadounidenses.
En tanto, la exportación de carnes de oveja y cabra (faenados enteros y medios; cortes, huesos y derivados comestibles, frescos o refrigerados) ocupó el número 343 (0,050%) del total global, $ 10,5 mil millones.
Carnes de ovejas y cabras
En 2021, los principales exportadores globales de carne ovina y caprina fueron Nueva Zelandia, $ 4,35 mil millones; Australia, $ 3,25 mil millones; Reino Unido, $ 631 millones; Irlanda, $ 419 millones; y España, $ 321 millones.
La lista de países latinoamericanos en 2021 la integraron en primer lugar Uruguay, $125 millones; Chile, $40 millones; Argentina, $ 20 millones; México, $ 13 millones; Brasil, $ 2 millones; Nicaragua, $ 240.471; Paraguay, $87.438; Cuba, $ 11.372; Guatemala, $ 1249; República Dominicana, $ 365; y Panamá, $ 349.
Animales en pie
Las exportaciones de animales vivos ovinos y caprinos, entre 2021 y el fin de la pandemia en 2023, fueron lideradas por Canadá, España, Sudáfrica, EEUU, Rusia, Reino Unido, Bélgica, China, Brasil. Chile, Suecia, Japón y Corea del Sur.
En 2022, en Latinoamérica sólo exportaban exiguamente Chile, $ 44.000; Uruguay, $29.000; y Paraguay, $ 27.000. Argentina, Brasil y México no tuvieron ventas desde 2019- 2020. Uruguay se desplomó después de 2020, cuando vendió $ 8,450 millones.
Lana y derivados
En 2021, la lana y derivados de Latinoamérica se vendían primeramente desde Perú, Uruguay y la Argentina, que promediaban $ 170 millones. Seguidos por México, Brasil, Chile, entre $ 33 millones y $ 18 millones, y Bolivia, Guatemala, Ecuador y Colombia.
Ese mismo año, la lana -esquilada, sin cardar ni peinar, entre otras- fue el producto número 615 (0,017%) entre todos los del comercio mundial. Su valor total $ 3,65 mil millones.
En 2021 los principales exportadores mundiales de lana fueron Australia, $ 2,570 mil millones; China, $ 1,930 mil millones; Italia, $ 1,700 mil millones; Alemania, $ 500 millones; Sudáfrica, $ 420 millones; Reino Unido, $380 millones; Nueva Zelandia, $ 320 millones.
Panorama angustioso
El Secretariado Uruguayo de la Lana (SUL) informó en su último boletín que, entre enero y junio 2023, las exportaciones totales ovinas por valor cayeron 13%. Las lanares y subproductos, 22%.
Lo único optimista son las cifras de carne ovina congelada con hueso, 2 % más que en el primer semestre de 2022. China fue principal comprador (61 %), seguido de Brasil (18 %).
La Patagonia argentina es azotada por sequías hace cuatro años. El productor Miguel O’Byrne comentó al periódico digital Bichos de Campo: “En Santa Cruz había 8 millones de ovejas. Este año calculamos que serán 1,8 millones”.
Históricamente, en toda la Patagonia hubo más de 20 millones de ovejas. Hoy, apenas 7 millones.