El destete es el acto de separar a la cría lactante de su madre y la transición de la alimentación con leche a la comida sólida. Esta práctica produce un estado de estrés tanto en la oveja como en el cordero, lo que tiene efectos negativos en la salud de ambos. Una forma de mitigar esto es aplicando el método de alimentación progresiva, que es una de las propuestas del Proyecto Eurosheep.
Como punto de partida se recomienda que las crías no sean destetadas hasta que alcancen de 3 a 4 veces su peso al nacer o 12 a 13 kilogramos de peso vivo. El peso al momento del destete influye en la tasa de crecimiento posterior y debe ser considerado como un criterio importante para la determinación de la separación entre madre y cordero.
Método de alimentación progresiva
En la producción ovina, el método tradicional de destete es la separación brusca, los corderos son separados de sus madres sin aplicar ninguna rutina previa. El método de alimentación progresiva sugiere seguir ciertas pautas, aplicadas gradualmente, para que el proceso de destete cause el menor estrés posible en los animales.
La primera indicación a seguir es el suministro de un forraje de buena calidad (La hierba o pasto que se da al ganado para alimentarlo) y una mezcla de concentrados a partir de los 10 días de vida del cordero. También se debe reemplazar el alimento diariamente y proporcionar agua de bebida limpia.
Asimismo, se debe dar de 200 a 250 gramos de pienso por cabeza y día, desde los 20 días de edad hasta el destete. Los comederos a utilizar deben ser cubiertos para minimizar la contaminación del alimento. Es importante que la zona de alimentación esté seca y bien asentada, ésta debe ser lo suficientemente larga para que la mayoría de los corderos puedan estar en ella al mismo tiempo.
Otra indicación es que las puertas de seguridad deben proporcionar espacios entre 20 y 30 centímetros para permitir la entrada de los corderos, pero mantener fuera a las ovejas. A medida que las crías llegan de 4 a 6 semanas de edad o más, los alimentos más gruesos se vuelven más apetecibles. Durante este período, la alimentación de los corderos puede cambiarse gradualmente de una ración “peletizada” completa o a una ración que contenga maíz triturado y suplemento (16% – 18% de proteína bruta).
Beneficios
Los beneficios del método de alimentación progresiva incluyen la reducción del estrés generado por el destete, el buen desarrollo del rumen, se evita la competencia de la madre y los lactantes por las pasturas y, económicamente hablando, los corderos podrían comercializarse antes para obtener precios más altos.